Casi 700 jóvenes de distintas parroquias, grupos y movimientos de la Diócesis han peregrinado el pasado fin de semana del 26, 27 y 28 de septiembre al Monasterio de Guadalupe, para encontrarse con la Virgen María. Recogemos el testimonio de Ana María, una joven de la Parroquia Santa Teresa de Jesús:

“Como todos los años este fin de semana 700 peregrinos fuimos a Guadalupe siguiendo el lema “María se levantó y se puso en camino”. Los peregrinos hicimos la maleta, metimos la ropa, la comida, y muchas peticiones y personas que no pudieron ir pero que también querían ponerse a los pies de la Virgen, y nos pusimos en camino. Salimos desde las distintas parroquias de la Diócesis para poner nuestras vidas en manos de la Virgen y así aprender de ella a decir Sí a lo que Dios quiera de nosotros. Después del cansancio de la caminata, donde compartimos esfuerzos y sacrificios pero con la  alegría de saber que no íbamos solos sino que caminábamos todos juntos como Iglesia que se ayuda en momentos de dificultad, que rezan juntos y que cantan y se alegran juntos. Llegó el momento de estar delante de nuestra Madre y depositarle todas nuestras intenciones, peticiones y de celebrar juntos la eucaristía con nuestro Obispo D. Joaquín y los 20 sacerdotes que nos acompañaron todo el camino. En mi corazón resuenan las palabras que nos dijo el sacerdote que nos animó a la llegada al santuario: “Cristo no quiere a la humanidad en general sino que te quiere a ti en particular: tú eliges, ¡O CRISTO O NADA! porque sin Cristo no tenemos nada”. Ahora nos toca a todos los peregrinos llevar la Buena Noticia que hemos recibido y vivido estos días a todos nuestros ambientes, como vimos en las catequesis la Virgen nos envía a ser misioneros para que todo hombre se encuentre con su Hijo, ¡CON MARÍA AL CIELO!”.