Más de 700 adultos, 50 niños, 52 parroquias y una veintena de movimientos se unieron el sábado 24 de octubre en el Santuario del Cerro de los Ángeles a la convocatoria del obispo de Getafe para participar en la Asamblea de discípulos misioneros. Este encuentro ha servido para ultimar los preparativos de la Gran Misión que conmemorará el 25º aniversario de la creación de la Diócesis.
El encuentro comenzó a las 9.30 horas con la acogida de los participantes y la entrega del material preparado para la jornada: el ‘Manual del discípulo misionero’, el calendario pastoral diocesano y las actas del Congreso de Nueva Evangelización que se celebró entre el 6 y el 8 de marzo.
Para preparar espiritualmente la asamblea, se celebró una eucaristía que presidió D. Joaquín. En su homilía, el obispo de la Diócesis animó a los misioneros a tomar conciencia de haber sido enviados por el dueño de la mies y de que la misión es hacer posible el encuentro con Jesús.
A través del comentario de las lecturas y del Evangelio, D. Joaquín animó a conocer a las personas, a seguir su rastro, a interpretar sus signos, a llevar esperanza, a escuchar, a confiar, a curar y a alimentar.
“Uno no puede ser misionero quedándose en casa”, afirmó el obispo, quien reclamó a los participantes en esta asamblea “combatir la falta de esperanza” durante la Gran Misión.
Después de la eucaristía, el delegado diocesano del Apostolado Seglar, D. Juan José Rodríguez Vicente, pronunció una conferencia bajo el título ‘La conversión misionera y el papel del laico’, con el objetivo de despertar el ardor necesario para abordar la Gran Misión a la que hemos sido llamados por nuestro obispo.
D. Juan José habló del deseo de felicidad que Dios ha puesto en todo hombre. El mundo se presenta como una oportunidad de que cada uno de nosotros podamos ser los brazos, la palabra, la sonrisa de Cristo, para los que lo necesitan.
“El mundo es el campo de acción propio de los laicos y tenemos una misión que cumplir”, afirmó.
“Si Jesús es lo que dice ser, ser hombre es más importante de lo que pensamos porque Dios mismo se ha hecho hombre”, aseguró el delegado diocesano de Apostolado Seglar durante su ponencia.
La segunda parte de la jornada estuvo dedicada al trabajo por áreas, con la presentación del proyecto marco de la Gran Misión en los ámbitos definidos como prioritarios: las parroquias, los colegios, las universidades, las cárceles y la pastoral de salud. La asamblea finalizó a las 14.00 horas con la ‘Oración por la Gran Misión’ (Oración del Papa Francisco en ‘Evangelii gaudium’).
El siguiente paso en la preparación de la Gran Misión será la presentación –antes del 29 de noviembre- de los proyectos misioneros por parroquias, congregaciones, movimientos y asociaciones. En el apartado de la web de la gran misión pueden descargar todos los materiales necesarios para realizar dichos proyectos.