confertresweb Confer-Getafe trasladó su jornada de formación anual a Toledo el sábado 5 de marzo, con el objetivo de recordar a Santa Teresa de Jesús, fuertemente vinculada a esta ciudad que no pudo ser visitada por la delegación diocesana de religiosos durante al año pasado, conmemorativo del V Centenario de su nacimiento.
El día resultó estupendo. Comenzó en el Convento de San José, el quinto que fundó Santa Teresa de Jesús. Acompañados por el padre Tito Plaza, los participantes en la jornada de Confer fueron recorriendo a grandes rasgos su vida y, luego, viendo el museo que tienen allí las Madres Carmelitas.
A continuación, los asistentes rastrearon las huellas de Santa Teresa por la Ciudad de las Tres Culturas.
De padre y abuelos toledanos, a Teresa le unen, además de por su estancia en ella, muchos lazos con Toledo.
Los miembros de Confer-Getafe recorrieron los lugares en los que residió, escribió, gozó y sufrió la monja andariega, la intrépida fundadora de la que aún quedan numerosos rastros en la ciudad.
La ruta concluyó en el Convento de los Padres Carmelitas Descalzos, donde los participantes tuvieron la dicha de compartir una opípara receta teresiana, servida con todo cariño y delicadeza por los frailes. La belleza del claustro albergó por un buen rato las emocionadas almas de los asistentes.
Por la tarde participaron en la Gran Fiesta Penitencial que la Iglesia en Toledo preparó para todos los fieles que deseasen acercarse al Señor y obtener la reconciliación.
En estos sábados de Cuaresma, la Catedral Primada abre sus puertas y se convierte en la Domus Misericordiae, abriendo su Puerta Santa para todo el que quiera traspasarla.
El día terminó cantando a una sola voz ‘Padre, abrázanos; Padre, abrázanos’, compuesto por sor Francisca, hermana hospitalaria de Ciempozuelos.