El obispo diocesano, D. Ginés García Beltrán, presidió el pasado 3 de diciembre una eucaristía solemne en la Catedral Santa María Magdalena (Getafe) con motivo de la visita de las reliquias de santa Bernardita Subirous (1844-1879) a la Diócesis de Getafe.

D. Ginés estuvo acompañado por el vicario episcopal de Pastoral Caritativa y Social, Aurelio Carrasquilla; por el delegado de Pastoral de Salud, Francisco Arias; por los párrocos de Chinchón y Colmenar de Oreja, Pedro Chaparro y Antonio Lucero, respectivamente, por el clero catedralicio y por otros sacerdotes de la Diócesis. 

El prelado manifestó en su homilía la importancia de la cruz que vivió santa Bernardita, “no una cruz colgada en el cuello, sino una cruz en el cuerpo y en el alma, porque el dolor y la enfermedad es prueba de fuerza de la fe en el Señor y la felicidad no es en este mundo sino en la visión eterna del Señor”. 

“Además, santa Bernardita tuvo la gracia de poder ver la imagen de la Virgen”, recordó D. Ginés.

Al término de la eucaristía se celebró una procesión de antorchas con las reliquias de santa Bernardita y la imagen de Nuestra Señora de Lourdes, acompañada del rezo del santo Rosario por las calles de la ciudad.

Esta procesión puso el broche de oro a una jornada intensa de oración y muestras de cariño de los fieles diocesanos hacia la santa francesa, que había comenzado poco después de las 9.00 horas, con la recepción de sus reliquias en la Catedral por parte del vicario episcopal de Apostolado Seglar, Jaime Bertodano; de los sacerdotes diocesanos, de los miembros de la Hermandad de Nuestra Señora de Lourdes y de algunos fieles.