La Parroquia Santos Justo y Pastor (Parla) acogió el pasado 18 de febrero una celebración especial, para rezar por la construcción de un santuario en honor de la Virgen de Schoenstatt, en el corazón de la Diócesis de Getafe. 

Cerca de un centenar de personas se congregaron para celebrar una eucaristía llena de amor, alegría y esperanza, presidida por el vicario episcopal de Apostolado Seglar, Jaime Bertonado, quien destacó que “La oración nos hace comenzar un camino de discernimiento, discernimiento de una cosa tan sencilla como importante… ¿Mater qué quieres de mí? Qué quiere la Mater, eso es lo que hay que discernir. Orar nos pone en el camino de buscar la voluntad de Dios”. 

Con estas palabras el Padre Jaime dejó en claro cuál era el objetivo de esta misa: orar en comunidad y discernir la voluntad de Dios y de la Virgen. 

“Que haya corazones que se contagien de ese amor a la Virgen, que quieran ofrecerse también a ella como instrumento” pidió Bertodano ante una asamblea profundamente devota de la Virgen de Schoenstatt.

Este será un signo claro de la Providencia, y ayudará al discernimiento del camino que se comenzó con esta misa en Getafe y que la Virgen quiere recorrer para quedarse con en la Diócesis.

“En los comienzos no hubo ningún milagro, ninguna aparición, sino una fe muy sobria en la Divina Providencia”, con estas palabras del P. Kentenich, fundador del Movimiento de Schoenstatt, el vicario resaltó la importancia de confiar en la divina providencia durante el proceso de discernimiento de la voluntad de Dios. 

“Para esto hemos venido, para una oración, para un discernimiento”, continuó. 

Explicó también con sencillez y cercanía, parafraseando a Kentenich, la pedagogía del Movimiento y su centralidad en la Virgen María como camino seguro a Cristo. 

“Desde que algunos empezaron a llamar a la puerta de Getafe, y que otros abrieron la puerta, ya ha habido signos de amor de la Mater. Ella nos pone siempre en movimiento, en un combate continuo que enardecido de amor filial busca la coronación de la Madre” destacó Jaime.

“La Mater ha llamado a la puerta y nosotros hemos respondido. Se ha dado el primer paso, el primer sí, pero ahora hay que seguir caminando, ponernos a su servicio. Ser los pies de la Mater para caminar por las calles de Getafe y que ella transforme corazones. Esta es la meta y Ella será la guía”, insistió el vicario de apostolado seglar.

“Si María llama a tu puerta, y le abres, no se hace esperar y conquista corazones. Ella es la gran evangelizadora y nos busca constantemente y sin cansarse para llevarnos hacia su Hijo. Como madre, se preocupa por sus hijos y quiere estar cerca de ellos. Quiere llegar a todos, y para ello nos necesita: ahora quiere llegar y establecerse en Getafe” concluyó Bertodano.

A partir de febrero, el día 18 de cada mes (el 18 es el día de la fundación de Schoenstatt) se rezará por esta intención.