Unas 176 familias getafenses han acudido a Cáritas de la Parroquia San Pablo para paliar sus necesidades básicas.
“En estos momentos tan duros que estamos viviendo con motivo del COVID-19, los sectores sociales de los pobres, los necesitados y los vulnerables, sufren mucho más aún por la falta de recursos que tienen y que en estas situaciones se agravan” explica el párroco José Ángel García Botello.
Desde la Caritas parroquial de San Pablo, les han facilitado apoyo, la compañía y el alimento básico para vivir, porque -señala el sacerdote- "queremos ser una pequeña ventana abierta a la esperanza de sus necesidades".
Durante el mes de abril han atendido a 176 familias desde el almacén de alimentos no perecederos y para el mes de mayo seguirán ayudando cada lunes a los indigentes y a las personas sin hogar y en la tercera semana del mes se ocuparán de más de 180 familias con la dotación mensual de alimentos.
