ordenados2016

Mª Ángeles Gómez, feligresa de la Parroquia San José (Fuenlabrada) rezó junto al obispo de Getafe, el pasado viernes 8 de mayo, por la noche, en el rato de oración que D. Ginés mantiene con la juventud, a través del canal diocesano de YouTube.

Esta joven, agradecida por las muchas iniciativas virtuales que los sacerdotes diocesanos y el prelado han puesto en marcha durante el confinamiento para estar cerca de sus fieles espiritualmente y no descuidar a su rebaño, ha querido compartir su testimonio con el corazón lleno de agradecimiento.

"Unas semanas antes del confinamiento, pensaba que quería vivir esta Semana Santa cerca de Jesús, el trabajo me absorbía demasiado tiempo y me preocupaba no poder dedicarle más. Días después estaba sin empleo y todo mi tiempo disponible para Él.
Desde el principio pensé que no quería que esto pasase de largo, ni desaprovechar esta ocasión para dejar que el Señor me hablase, para dejarme amar y transformar por Él. Reconocer su Presencia en esta situación tan extraordinaria.
Sin sacramentos, eucaristías ni reuniones de comunidad, resulta mucho más complicado vencer las tentaciones y más fácil alejarme del Señor.
Ha sido (aún es) una verdadera prueba de fe para mí, siento que Jesús, despojándome de todo, me pregunta una y otra vez si le amo y si quiero seguirle, igual que hizo con Pedro.
Una prueba de fe, humildad y obediencia, porque este camino no lo estoy haciendo sola, sino dentro de una familia que es la Diócesis, que, aunque es duro para todos no poder vernos ni interactuar físicamente, vivimos junto a los sacerdotes eucaristías, meditaciones, catequesis… estamos conectados por el móvil, videollamadas… siento de una forma muy clara la unión fraterna de la que tengo suerte de participar.
El sometimiento a esta obediencia está afianzando en mí el papel tan importante que tiene la Iglesia para los católicos. Pienso que realmente es nuestra fidelidad a ella, la que sostiene y mantiene nuestro seguimiento y relación con Cristo. Y es en tiempos de prueba, donde la Iglesia se hace más necesaria en general y en particular.
Estoy muy agradecida por la cantidad de iniciativas que desde el principio han tenido muchos de los sacerdotes de la Diócesis a través de YouTube y del resto de redes sociales. Me consta que algunos de ellos sin ninguna experiencia, lo que, a mi parecer, tiene más valor por la paciencia que requiere aprender este tipo de cosas.
Me impresiona la rapidez con la que se han ido organizando para hacernos llegar a todos las diferentes opciones. Realmente, es importante tenerles cerca, aunque sea en la distancia.
En la misma línea, aunque de manera más concreta, se me hace muy evidente y necesaria, la compañía cristiana concretada en la comunidad. Descubro la Presencia del Señor en mis días y siento necesidad de compartirla para experimentarla en su plenitud.

Poco a poco iremos saliendo del cascarón, sinceramente no sé lo que nos esperará a partir de ahora, me preocupa, pero no me asusta, cada día le pido al Señor que nos prepare y transforme nuestro corazón para afrontar este nuevo comienzo de su mano".