El sacerdote de la Diócesis de Getafe Javier Romera Martínez ha cumplido recientemente su primer aniversario como párroco en Santiago Apóstol, templo ubicado en Villaviciosa de Odón, municipio donde ha pasado el confinamiento y ha colaborado, junto al resto de agentes de pastoral, en paliar los efectos de la pandemia.
Romera ha señalado que “hasta Villaviciosa también han llegado las colas del hambre” aunque quiere transmitir un mensaje de esperanza y cree que “pese a los difíciles momentos vividos y la incertidumbre que vuelve a sobrecoger al municipio en el contexto actual de la segunda ola de la pandemia en España, saldremos fortalecidos”.
En Villaviciosa Digital han querido entrevistarle y hablar con él sobre las necesidades y retos a los que enfrenta la parroquia en tiempos de la Covid 19, sus objetivos pastorales y el papel de la fe ante las crisis y el sufrimiento.
El párroco se ha mostrado agradecido a Dios por que le haya tocado vivir este momento “en primera línea de fuego, en una parroquia”.
Según señala Villaviciosa Digital: “este primer año ha estado marcado por la pandemia, y le ha servido a Javier Romera para pulsar la fe de los villaodonenses”.
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