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El obispo de Getafe, D. Ginés García Beltrán ha presidido en la noche del sábado 25 de julio, festividad de Santiago Apóstol, un emotivo funeral en la Basílica Menor del Sagrado Corazón de Jesús por las víctimas diocesanas de la covid-19.

El prelado ha tenido palabras de consuelo y ha puesto bajo el amparo del apóstol  patrono de España no sólo a los fallecidos por coronavirus, sino también a los enfermos, a los sanitarios “y a todos los que han entregado y se entregan para luchar contra la enfermedad, y sus consecuencias socioeconómicas”.
D. Ginés ha querido invitar a todos los presentes a construir un futuro con esperanza, huyendo de todo egoísmo y divisiones, y ha tenido muy presente en sus palabras también a los mayores.
Con las medidas de seguridad e higiene marcadas por la Administración, la Basílica del Cerro de los Ángeles ha acogido a varios centenares de fieles diocesanos entre los que se encontraban varios de los familiares de los fallecidos por la pandemia.
También el Consejero de Vivienda y Administración Local de la Comunidad de Madrid, David Pérez y los alcaldes de Arroyomolinos, Ana Millán; Chapinería, Lucía Moya; Colmenar del Arroyo, Belén Barbero; Parla, Ramón Jurado; San Martín de Valdeiglesias, Mercedes Zarzalejo; Torrejón de Velasco, Esteban Bravo; Valdemoro, Raquel Cárdenas y Villanueva de la Cañada, Luis Partida, han querido con su presencia sumarse al funeral por el eterno descanso del alma de los difuntos.
Junto a ellos han asistido concejales de otros municipios de la Diócesis que han acudido en representación de los primeros ediles; directores de los centros hospitalarios de Fuenlabrada, Getafe y Valdemoro,  autoridades de la Base Aérea getafense, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional de Getafe y miembros de varias Asociaciones de Fieles e Instituciones del territorio diocesano.
El prelado D. Ginés García Beltrán ha estado acompañado en el altar por el obispo auxiliar, D. José Rico Pavés; el obispo emérito, D. Joaquín María López de Andújar; por el vicario general, Javier Mairata, vicarios episcopales, el rector del Seminario, el canciller y vicecanciller y varios sacerdotes de algunos de los municipios con mayor número de fallecidos por la covid -19.
La eucaristía comenzó con una monición de entrada a cargo del sacerdote Javier Ávila quien dirigió al apóstol Santiago, “nuestra oración por los pueblos y gentes de España afectados por las consecuencias de la pandemia. Oraremos por el eterno descanso de los fallecidos y por el consuelo y la paz de sus familias. Y daremos gracias por los que generosamente se han entregado y se entregan para luchar contra la enfermedad y sus consecuencias socioeconómicas”.
En su homilía D. Ginés ha dedicado palabras de acogida, agradecimiento y cariño hacia los familiares de las víctimas, y también hacia las autoridades que han querido rendirles homenaje con su presencia en este funeral.
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También les ha trasladado palabras de consuelo y de esperanza destinadas a confortar sus corazones y a hacer presente la cercanía de la Iglesia en estos momentos tan dolorosos.
D. Ginés ha querido comenzar poniendo de relieve la fragilidad del ser humano “somos vasijas de barro” pero en medio de esa debilidad, ha dicho el obispo, se manifiesta la grandeza de Dios.
“La pandemia nos ha paralizado, no sólo confinándonos en nuestras casas, sino por nuestra cerrazón del corazón y del entendimiento. Ha habido momentos en los que hasta nos ha flaqueado la esperanza y la fe”, ha dicho García Beltrán.

Pero en medio de ese sufrimiento y de la muerte “Dios se ha manifestado y nos ha acompañado” ha continuado D. Ginés.

“Sufrimiento y muerte forman parte de la vida y es un error en nuestra cultura querer maquillarlo u ocultarlo”, ha subrayado D. Ginés, y ha añadido “a la luz de la fe, los cristianos podemos entender el sufrimiento, la fe nos hace comprender que la muerte no tiene la última palabra”.
D. Ginés ha querido tener unas palabras especiales para los mayores, que han sufrido especialmente las consecuencias de la pandemia  y parafraseando al Papa Francisco ha recordado que: “una sociedad que abandona a sus mayores y prescinde de su sabiduría es una sociedad enferma y sin futuro, porque es una sociedad a la que le falta la memoria”.
Después el prelado ha hecho una fuerte llamada a la unidad “a prescindir en el futuro de todo egoísmo. No podemos permitirnos el escándalo de la división y menos en estas circunstancias. Tenemos que construir con espíritu de servicio a la sociedad”.
No ha querido concluir García Beltrán sin manifestar su deseo de que la Iglesia sea compañera del camino “en aquellos que sufren por la enfermedad y la muerte de seres queridos; que nuestras parroquias y comunidades fueran verdaderos hogares que acogen a los heridos por el sufrimiento, que saliéramos a los caminos para encontrar al que nos necesita”.
Y que, “siguiendo ese ejemplo de la Iglesia, también sus hijos se sientan llamados a consolar y llevar esperanza a todos los que sufren” ha subrayado D. Ginés
El prelado diocesano ha terminado con unas palabras de agradecimiento a todos los que han hecho “tanto bien durante la pandemia: sanitarios, cuerpos de seguridad del Estado (…) y sacerdotes que muchas veces han estado en primera línea atendiendo en medio de la enfermedad y otras han demostrado una gran imaginación pastoral”.
Y ha añadido: “tendremos que escribir historias de santidad que nos han mostrado el rostro de Dios en medio del sufrimiento”.
Con un ruego a la Virgen María “a quien le pedimos que nunca nos deje de la mano, que nos lleve en su regazo y nos regale una fe como la suya” ha concluido la homilía.
Según fuentes oficiales, el número de fallecidos en la región asciende a más de 8.500, siendo algunos municipios de la Diócesis, como Leganés, Valdemoro, Parla, Getafe, Fuenlabrada y Alcorcón, los más afectados por la pandemia.

Descargar la homilia completa aquí:

Video resumen del acto: https://www.youtube.com/watch?v=FSFlX-_o2EM&feature=youtu.be