El obispo D. Ginés García Beltrán presidió el pasado domingo 4 de septiembre la celebración del 50 aniversario de la erección canónica de la Parroquia Nuestra Señora de la Paz (Parla).
El prelado estuvo acompañado del párroco y arcipreste, Jesús Aparicio, algunos sacerdotes que habían ejercido su ministerio en esta parroquia y otros pertenecientes al arciprestazgo, que quisieron compartir la celebración, así como un gran número de fieles parleños.
D. Ginés, además de saludar a sus hermanos presbíteros, dirigió unas palabras de cariño a ‘Poche’ (José María Uxo), el vicario parroquial, “a quien la enfermedad le ha impedido estar hoy aquí pero que seguro que lo está celebrando con el corazón”.
Además, el obispo también saludó a las dos comunidades de vida consagrada “que ejercen una gran misión pastoral en Parla” alentándolas a continuar con su labor evangelizadora.
“Es una gran alegría poder compartir con vosotros estos cincuenta años de presencia de la fe, presencia viva de la Iglesia en el pueblo de Parla” comenzó diciendo el obispo en su homilía.
D. Ginés, tomando como referencia las lecturas del día, animó a los presentes a mirar la historia de la parroquia y en concreto “al pasado con agradecimiento, al presente con realismo y al futuro con esperanza”.
“Esta comunidad parroquial empezó con dificultades, sencillez y pobreza en medio de un barrio obrero y se convirtió en un hogar para todos aquellos que sufrían injusticias” destacó García Beltrán.
“En estos 50 años tenemos que dar gracias a Dios porque esta parroquia ha ido creciendo y lo ha hecho con la ayuda de las personas (…) vosotros sois la parroquia. La Parroquia no son estos muros, la parroquia está en vuestros hogares, en vuestros trabajos, porque sois vosotros” añadió.
Continuó D. Ginés con una mirada al presente, “un presente de salvación porque hoy esta parroquia es un hogar abierto para todos, donde se anuncia a Jesucristo, donde se celebra la fe y se vive la caridad. Donde se hace presente la comunión con la Iglesia diocesana y la Iglesia universal”.
Por último, el prelado quiso terminar su homilía con unas palabras de aliento y una petición al pueblo y a los sacerdotes presentes a dejarse guiar por la acción del Espíritu Santo y a continuar con la labor misionera, integradora y evangelizadora que han vivido hasta ahora en la parroquia.
“La Palabra de Dios nos invita hoy también a vivir el futuro con esperanza. El futuro de esta parroquia guiados por el Espíritu Santo que nos ayuda a conocer la voluntad de Dios” concluyó.
El actual párroco, Jesús Aparicio, que también dirigió unas palabras a su feligresía durante la celebración ha explicado que se siente “muy agradecido” por la presencia y el aliento del obispo de Getafe que les ha acompañado en la celebración de este aniversario y que la parroquia continuará, como les ha pedido el prelado “comprometida con la defensa de los trabajadores, la inmigración, la promoción de la mujer, de la paz, de los necesitados y de los que más sufren y con unaa intensa actividad celebrativa como la que se ha desarrollado a lo largo de estos cincuenta años de existencia”.
Con esta eucaristía se abre un tiempo de celebración que se prolongará durante este año y que ya se ha ido preparando con la edición de varias publicaciones que recogen en imágenes los momentos principales de la historia de la parroquia. La próxima entrega verá la luz a lo largo del mes de septiembre.
Además se están preparando otras actividades para celebrar este año que incluyen formación, una exposición fotográfica, un mural colaborativo, una oración celebrativa musical,... etc.
