El obispo auxiliar de Getafe, D. José María Avendaño, asistió el pasado viernes 16 de diciembre al acto de clausura de la fase diocesana de la causa de beatificación de 140 siervos de Dios, víctimas de la persecución religiosa de los años 30 en Madrid, que se celebró en la Catedral de La Almudena.
Señala D. José María que es “una gracia y un testimonio” para todos los fieles diocesanos el ejemplo de estos mártires -18 en la Diócesis de Getafe- .
“Es impresionante la valentía, el coraje, y el gran amor a Cristo y a la Iglesia que han demostrado, tanto jóvenes como adultos, laicos y sacerdotes, hasta el punto de entregar su vida, de derramar su sangre” subraya el prelado diocesano.
“También es importante resaltar, como dijo Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid, que ninguno de los siervos de Dios que se presentaban al escrutinio de la comisión histórica ha tenido que ser excluido” explica Avendaño.
El encuentro, presidido por el arzobispo de Madrid, cardenal Carlos Osoro, comenzó con las palabras de Juan Antonio Martínez Camino, quien indicó que “todo ha ido muy bien. Hoy tenemos la grandísima alegría de participar en este solemne acto de la clausura de esta causa en su fase diocesana”.
El auxiliar de Madrid añadió que “Dios ha guiado los trabajos de la causa con su providencia amorosa. Gracias a la comisión instructora, presidida por el delegado episcopal para las causas de los santos, Alberto Fernández. Este acto pone un solemne punto final al trabajo de todas las personas a quienes el cardenal Osoro encargó esta tarea”.
“El resultado del trabajo son los casi 14.000 folios que hay en cajas. Ahí está la documentación y los testimonios escritos de los testigos. La semana próxima yo mismo los llevaré a Roma al haber sido nombrado por el obispo para este encargo. El proceso continuará allí en Roma, en el dicasterio para la causa de los santos” explicó.
Por último remarcó que “este acto constituye un hecho histórico para nuestras iglesias diocesanas. De los 140 siervos de Dios, 55 eran sacerdotes que ejercían su ministerio en Madrid y 6 en el actual territorio de Getafe. Entre los laicos hay personas de todos los oficios, de todas las edades y de todas las clases sociales. Todos están unidos por su fidelidad a la fe en Jesucristo y la madre Iglesia. Estos ya son para nosotros ‘Santos de la puerta de al lado’”.
Por su parte, el cardenal Osoro indicó que “este es un momento para decir al Señor: gracias. Gracias por tener a nuestro lado testigos de la fe. Son personas que han sido capaces de entregar la vida y no renegar de nuestro Señor, sino afirmar la opción fundamental de la vida de un ser humano que es sentirse hijo de Dios. Quiero dar gracias al Señor, dar gracias a todos los que habéis trabajado para que podamos vivir todo este acto”.
“Lo más grande es ser santos. Ser hombres y mujeres de Dios, que anunciamos con nuestra vida a Jesucristo. Poder presentar hoy esto y estas biografías es muy importante porque estas personas no han renunciado a Jesucristo, sino que han afirmado su fe en el Señor” resaltó.
Al término del acto, el cardenal afirmó que “hoy es un día de gracia para esta Iglesia que camina en Madrid, es un día especial. El juicio lo dará la Iglesia, pero presentamos a personas que han manifestado con su propia vida lo que supone ser discípulo de Jesucristo”.
