Más de 400 personas del barrio fuenlabreño de Loranca recibieron el pasado 13 de octubre la buena noticia del amor de Dios anunciada por 40 misioneros pertenecientes al grupo evangelizador Koinonía.
Un camino de velas encendidas brillando en la oscuridad de la noche, el ‘vía lucis’, guió a todos los que quisieron acercarse hasta Cristo Eucaristía presente sobre el altar de la Parroquia Sagrada Familia.
Unos eran creyentes convencidos, otros alejados de la fe, agnósticos o ateos, pero todos pudieron ponerse a los pies de Cristo.
Después del tiempo de misión llegó el turno de escuchar los testimonios, durante el que se compartieron las vivencias experimentadas por cada uno.
Los misioneros participantes destacaron las heridas que se encontraron en las personas con las que conversaron y la necesidad perentoria de sanación que requerían por el único que puede ofrecérsela y ante el que se invitaba a exponerlas en diálogo de corazón a corazón.