reliquiasmargaritaboadillaw

Las reliquias de santa Margarita María de Alacoque visitaron la Diócesis de Getafe del 18 al 20 de noviembre, recorriendo los monasterios del Carmelo (Cerro, La Aldehuela y Boadillla del Monte), y el Santuario del Sagrado Corazón así como la Parroquia Santo Cristo de la Misericordia (Boadilla del Monte).
Esta visita forma parte de las iniciativas de preparación de los fieles para la celebración del Centenario de la Consagración de España al Sagrado Corazón de Jesús.
En las distintas eucaristías celebradas a lo largo de esos días, se dio a conocer la figura de santa Margarita, las revelaciones del Corazón de Jesús y la importancia capital de la devoción al Sagrado Corazón.
A santa Margarita, monja salesa francesa de final del siglo XVII, le tocó vivir en un momento histórico especial, en el que había una fuerte influencia del jansenismo, que alejaba mucho a Dios del hombre y que provocó una frialdad espiritual en las personas. En aquel tiempo comenzaban filosofías y políticas que querían organizar la sociedad sin tener en cuenta a Jesucristo.
Durante la visita de las reliquias se destacó como punto fundamental el amor infinito, apasionado, de Jesús por los hombres, que entrega su vida entera a través de la Eucaristía.
El 18 de noviembre, en el Santuario del Cerro, el obispo auxiliar de Getafe, D. José Rico, presidió una celebración eucarística junto a las reliquias de la santa. Una vez terminada la misa, cuatro religiosas jóvenes recogieron las reliquias de forma espontánea y las llevaros en procesión, acompañadas por muchos fieles hasta el Carmelo.
El 19 de noviembre, tras la misa concelebrada en La Aldehuela y presidida por el obispo emérito D. Joaquín María López de Andújar, las reliquias viajaron hasta el Carmelo de Boadilla, donde también se celebró una eucaristía y una hora santa. La misa estuvo presidida por el sacerdote Julio Rodrigo Peral que en su homilía destacó algunos de los aspectos principales de la vida interior de Santa Margarita.
En  primer lugar la oración, donde citando al papa Papa Francisco, dijo: “que no cree en la santidad sin oración”.
En segundo lugar las revelaciones que tuvo Santa Margarita, que se daban estando ella en oración ante el Santísimo Sacramento,  y cuyo fin era revelar su infinito amor por sus criaturas. El Señor le pedía a Santa Margarita darlo a conocer y compensar tanta falta de amor que recibía.
Por la tarde se trasladaron a la Parroquia Santo Cristo de la Misericordia, donde hubo un acto especial y emotivo para los numerosos niños de catequesis, que introdujeron las reliquias en la iglesia. Después fue impartida una charla espiritual especial para ellos.
Entre las dos misas vespertinas hubo otra charla, esta vez para los adultos de la parroquia, centrada en la devoción al Corazón de Jesús.
Después de la segunda misa, se expuso el Santísimo, se celebró una hora santa dirigida por el párroco y se establecieron turnos de adoración hasta las 5.30 horas de la madrugada, con numerosos fieles que adoraron al Santísimo y veneraron las reliquias de santa Margarita.
A esa hora se celebró la misa de despedida y, a su término, cuatro personas portaron las reliquias hacia el exterior con un gran aplauso por parte de los asistentes.