obispoenromawebVisita Ad limina del Obispo de Getafe: 24 febrero -2 de marzo


Desde el 24 de febrero hasta el 2 de marzo el Obispo de la Diócesis, D. Joaquín María López de Andújar y Cánovas del Castillo, acompañado de su Obispo Auxiliar D. José Rico Pavés viajará hasta Roma para reunirse con los distintos dicasterios del Vaticano y presentar la situación actual de la Diócesis de Getafe, en lo que se denomina la Visita ad limina Apostolorum.


Está previsto que cada obispo previamente envíe a la Nunciatura, antes de realizar su viaje, el informe sobre el estado de la diócesis. Una vez leídos por la Congregación para los Obispos, estos informes son referidos al Papa.


Una vez en Roma el Obispo visitará los distintos dicasterios (nombre genérico con el que se denominan todos los organismos de  la Santa Sede), por ejemplo las Congregaciones: para la Doctrina de la Fe; la del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos; Obispos: Clero; Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, etc, y también los Pontificios Consejos como el de la Promoción de la Nueva Evangelización.


Además el viernes día 28, a las 10:30h, los Obispos de la Provincia Eclesiástica de Madrid tendrán un encuentro privado con Su Santidad Francisco.


Origen y objetivos de la Visita ad Limina


Los orígenes históricos de la Visita ad Limina datan del siglo IV, aunque fue el Papa Sixto V en 1585 quien la institucionalizó y dispuso de modo más sistemático. En la actualidad, la Visita ad Limina se define y precisa en los cánones 399 y 400 del Código de Derecho Canónico. Según esta legislación de la Iglesia, los Obispos diocesanos deben visitar las tumbas de los Apóstoles, encontrarse con el Sucesor de Pedro y presentar un informe o relación de sus respectivas diócesis cada cinco años, aproximadamente.


Su significado es el de visibilizar la unidad y la comunión de los sucesores de los Apóstoles con el sucesor de San Pedro y de las Iglesias locales con la Iglesia primada de Roma. De este modo, la Visita ad Limina es una ocasión para la comunión eclesial, la colegialidad episcopal y la caridad fraterna entre los Pastores y el Papa.