La Diócesis de Getafe celebrará la solemnidad de la Divina Misericordia el próximo 8 de abril, segundo domingo de Pascua, con una eucaristía a las 19.00 horas en la Parroquia San Salvador (Pl. España, s/n. Leganés).
A las 17.00 horas habrá un retiro espiritual y se rezará la Coronilla de la Divina Misericordia, con exposición del Santísimo y un tiempo de meditación.
También se dará a los asistentes la posibilidad de celebrar el sacramento de la reconciliación.
Después de la eucaristía se rezarán unas vísperas para clausurar la octava de Pascua.
También en Alcorcón
En la Parroquia Nuestra Señora de la Saleta (Pl. Brasil, s/n. Alcorcón) también se celebrará la solemnidad de la Divina Misericordia con varias eucaristías a lo largo del día: a las 9.30, a las 11.00, a las 12.00, a las 13.00 y a las 19.00 horas.
Además, se bendecirán imágenes y estampas de Jesús misericordioso y se rezará el Rosario de la Divina Misericordia.
En Boadilla del Monte
En el Convento de las Madres Carmelitas de Boadilla del Monte también se celebrará esta fiesta de manera solemne. A las 9.00 horas habrá rezo de la Coronilla de la Misericordia, exposición del Santísimo y palabras de Jesús acerca de su misericordia dirigidas a todos a través de su mensajera, santa Faustina Kowalska. Seguidamente, a las 10.00 horas se celebrará la santa misa
En Getafe
La Parroquia Santa Maravillas de Jesús (C/ Medina Azahara, 2.Getafe) recordará la devoción a la Divina Misericordia en las celebraciones de las 12.00, 13.00 y 20.00 horas.
Siguiendo las revelaciones a santa Faustina
Santa Faustina Kowalska escribió en su diario, en relación a la fiesta, las siguientes palabras, que ella experimentó en su interior que Jesús le decía: “Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea la salvación y el refugio de todas las almas, especialmente de los pobres pecadores. En ese día se abrirán las puertas de mi misericordia. Derramaré todo el océano de mis gracias sobre las almas que se acerquen a la fuente de mi misericordia. El alma que aquel día se confiese y comulgue obtendrá la remisión completa de las culpas y los castigos. Que nadie tema acercarse a mí, aunque sus culpas fueran las más atroces. Esta fiesta, nacida de lo íntimo de mi misericordia, queda confirmada en sus profundidades... Deseo que se celebre solemnemente el primer domingo después de Pascua de Resurrección”.
