Algunas de las parroquias de la Diócesis de Getafe se están preparando ya para celebrar la fiesta de san Antonio, el próximo sábado 13 de junio.

La Parroquia San Antonio (Aranjuez) está celebrando una novena en honor del santo, todos los días antes de la misa de 19.30 hora, y el sábado habrá una misa solemne a las 11.00 horas presidida por el párroco, Yago Fernández de Alarcón. Este año por cuestiones de seguridad no se venderán las tradicionales rosquillas del santo.

La Parroquia San Pedro Bautista (Alcorcón) también se sumará a la celebración de esta fiesta con una eucarístia en honor del santo a las 11.00 horas y otra a las 19.30 horas. Además los días 11, 12 y 13 se ha preparado un triduo a San Antonio, santo portugués de la orden franciscana, conocido por su capacidad de prédica proverbial, y a quien se invoca para recuperar objetos perdidos o encontrar el amor.

La Parroquia San Juan Bautista (Fuenlabrada) también va a celebrar este día con una eucaristía solemne a las 19.30 horas a la que se ha invitado a todos los fieles de la localidad.

Es tradición en esta fecha repartir los panecillos bendecidos del santo; tradición que se vincula a la caridad y que encuentra su significado en el acto de compartir.


Historia de la tradición de los panecillos de san Antonio
El pan de San Antonio es sinónimo de caridad. El nacimiento de esta tradición se remonta a uno de los milagros del santo que tuvo como protagonista a Tomasito, un niño de 20 meses que se ahogó en un pozo de agua.
La madre desesperada invocó la ayuda del santo e hizo una promesa: si obtenía la gracia iba a darle a los pobres el mismo peso en pan que el peso del niño. Y el pequeño milagrosamente volvió a la vida.
Este milagro dio origen a dos obras en fidelidad al espíritu de San Antonio: primero la Obra del Pan de los Pobres, la organización antoniana que en Padua se ocupa de llevar alimentos y enseres de primera necesidad y asistencia a las personas en dificultad.
La segunda obra es la “Cáritas Antoniana Onlus”, el ente caritativo de los frailes del santo que en 2016 ha sostenido 124 proyectos de desarrollo en 40 países del mundo, por un total de 2,6 millones de euros.