05/03/2024. Decenas de familias del Familión han peregrinado un año más hasta el Valle de los Caídos, para rezar el santo Viacrucis, el pasado 2 de marzo, víspera del tercer domingo de Cuaresma.
Un centenar de personas participaron en esta iniciativa a pesar del frío, la lluvia y la nieve. Adultos, jóvenes y niños recorrieron durante la mañana las catorce estaciones rezando y participando también del sacramento de la reconciliación, en el paraje excepcional que les proporcionaba la sierra de Guadarrama.
Por la tarde, después de la comida compartida en la hospedería benedictina, celebraron la Eucaristía en la Basílica presidida por el sacerdote Pablo Fernández Martos, párroco en Jesús y San Martín (Getafe), que acompañó a las familias durante toda la jornada.
En su homilía, el presbítero recordó, en relación al Evangelio del día que narraba el enfrentamiento de Jesús con los mercaderes del templo, que “todos somos templos vivos del Dios vivo por el Bautismo”, y les advirtió que no convirtieran “su vida en un mercado, con tantos ídolos y cosas que, siendo buenas, acaban adquiriendo un protagonismo por delante de Dios”.
“En nuestra vida le damos a las cosas más importancia que a Dios mismo” subrayó.
Destaca Fernández Martos que “ha sido una jornada preciosa, con un gran ambiente familiar, en la que han participado incluso bebés, que, portados por sus padres, han realizado todo el recorrido”
“Nos gustaría que todo el mundo se animara a participar en las actividades que organiza el Familión. La próxima es el 'Camino de María' hacia Logroño” concluye.
