La Diócesis de Getafe se sumó el fin de semana del 9 y 10 de julio a la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico 2016, con diferentes actividades en las que se resaltó el compromiso y la concienciación de todos los conductores, profesionales o no, al volante de cualquier vehículo.
Este año, el lema elegido era ‘Bienaventurados los misericordiosos’, ya que estamos en pleno Año Jubilar de la Misericordia, y el objetivo era recordar que conducir bien y con responsabilidad es agradar a Dios, así como ser solidarios, comprensivos, humanos y caritativos, guardándose el mal humor y los improperios al volante.
La Agrupación de Transportistas de Getafe (ATG), con su presidente D. Juan Carlos Moreno a la cabeza, organizó durante el fin de semana una gran fiesta para celebrar a su santo patrono, San Cristóbal, y la Jornada de Responsabilidad en el Tráfico.
El delegado diocesano de Pastoral de la Carretera, D. Juan Antonio Rodríguez, celebró misas de campaña para todas las familias cristianas de la ATG que quisieron escuchar la Palabra de Dios y para los fieles de la Diócesis que se acercaron hasta el recinto ferial de Getafe.
En su homilía, tras saludar y felicitar a todos los presentes, hizo referencia al Evangelio del día sobre la parábola del Buen Samaritano. “Él se compadece, se para, atiende y ayuda al herido, aunque sea a costa de su tiempo y de su dinero”, recordó, y terminó diciendo como Jesús al maestro de la ley: “Anda y haz tú lo mismo”.
“Siempre, entre los camioneros ha existido la cordialidad, la acogida y la ayuda en los accidentes, dispuestos a echar una mano a todo el que lo necesita”, recordó el sacerdote.
D. Juan Antonio Rodríguez prosiguió su homilía recordando a las miles de víctimas que cada año pierden la vida en las carreteras y al sufrimiento de sus familiares.
“Desgraciadamente, la carretera va asociada a la muerte de bastantes centenares de personas que anualmente pierden la vida en accidentes de tráfico. Múltiples son las causas por las que se aconseja la responsabilidad en el tráfico: no llevar puesto el cinturón de seguridad, abusar del alcohol y las drogas, hablar por el móvil, tocar el GPS en marcha, el exceso de velocidad… También se producen siniestros por el envejecimiento de los automóviles, etc. Según las estadísticas, el pasado 2015 perdieron la vida en accidentes de tráfico 1.126 personas (incluidos 219 motoristas). Oremos por ellas y por sus familiares”, explicó.
A continuación, se procedió a bendecir todos los vehículos que se encontraban estacionados en el recinto ferial para, acto seguido, iniciar la procesión del santo, que fue precedido por más de 30 camiones y varios vehículos particulares, taxis y Protección Civil, que recorrieron las principales calles de la ciudad haciendo sonar sus bocinas.
Una verbena, una gran orquesta, bailes, globos, rifas y la gran paella del domingo para más de 2.000 personas, que la compartieron solidariamente con los más desfavorecidos del municipio, cerraron los actos de esta Jornada de Responsabilidad en el Tráfico.
