La Catedral Santa María Magdalena (Getafe) se llenó de expectación y sonrisas el pasado 4 de enero ante la esperada visita de los Reyes Magos llegados desde Oriente.
Sus Majestades, tras ser recibidos en la puerta, avanzaron por el pasillo central, precedidos por los monaguillos y el clero de la Catedral y seguidos por el séquito real, entre el clamor y la admiración de todos los congregados allí.
Después de venerar la imagen del Niño Jesús, los Reyes Magos fueron saludados por el vicario general y moderador de Curia, Javier Mairata, que les agradeció, en nombre del obispo diocesano y su auxiliar, su presencia entre los niños de la Diócesis.
Melchor, actuando de portavoz de los tres Reyes, dirigió unas breves pero entrañables palabras a todos los presentes, poniendo en el centro de todas las miradas el admirable misterio del nacimiento de Jesús.
Unos breves momentos de adoración eucarística ayudaron a todos a reconocer que lo más importante que nos enseñan los Reyes Magos es la búsqueda y la adoración de Jesús.
Después, Sus Majestades quisieron saludar a cada niño y recoger sus cartas, antes de marcharse a la intensa labor que les esperaba en la noche del 5 de enero.