Catedral de Bourges (Francia)“La Arquitectura al servicio de la Liturgia” es el nombre del próximo congreso organizado por la Fundación San Juan y el Colegio Oficial de Aparejadores de Madrid, con el apoyo de la Universidad Eclesiástica San Dámaso. El evento se llevará a cabo los días 09 y 10 de mayo y contará con la participación de Monseñor Juan Miguel Ferrer, subsecretario de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos. El congreso promueve un diálogo entre la liturgia, el arte cristiano y la arquitectura “que sea fecundo y que sirva para embellecer nuestras iglesias, embellecer nuestros monasterios y que a la vez esta belleza sirva para el culto, para la liturgia cristiana”. Así lo explicó, en diálogo con Gaudium Press, el presidente de la Fundación San Juan, padre Jesús Folgado.

“La liturgia de la Iglesia configura el espacio sagrado y los arquitectos, proyectistas y constructores, si saben de liturgia, construirán templos que sean más adecuados”, comentó el P. Folgado, quien destacó además el interés que el sector civil ha manifestado en tener un contacto más cercano con la Iglesia en esta materia. “Desde el propio Colegio se le pidió a Monseñor Ferrer y a la Congregación del Culto Divino que dieran una formación a la hora de diseñar, de crear espacios sagrados”, sostuvo. Este diálogo ofrece, según comentó el sacerdote, la oportunidad para hacer un mejor uso de los recursos técnicos y artísticos en la evangelización y corregir algunas tendencias actuales que se separan del fin propio de la arquitectura religiosa. “Nos encontramos, al menos en España aunque creo que esto se da en todo el mundo, que existe una disociación entre la arquitectura y la liturgia”, explicó el P. Folgado. “Entonces se pueden hacer unas iglesias que son arquitectónicamente bellas, pero que luego no valen para el culto cristiano, para la realización de las actividades pastorales”. Sobre los alcances del próximo congreso, el presbítero indicó que es un punto de contacto entre los aparejadores, los arquitectos y la universidad eclesiástica con un énfasis en la restauración del patrimonio. Pero la finalidad es más amplia: “Lo que nosotros vemos como muy positivo es que el mundo civil se interese. El Santo Padre nos está invitando a ese “atrio de los gentiles”, a ese diálogo con nuestro mundo contemporáneo y me parece que esto cumple perfectamente”, concluyó el padre Folgado. “Se hará presente la Iglesia, pero también los laicos y son ellos los que promueven que exista ese diálogo. Me parece que es algo que debemos de potenciar”.

Gaudium Press / Miguel Farías