Quisiera destacar la figura del Animador/a de V. A. cuya misión en el grupo es convocar, animar y regular la participación de las personas en las reuniones. También cabría señalar y agradecer su valiosa aportación dentro del Movimiento de Apostolado Seglar de jubilados y mayores. Con la ayuda de Dios y el esfuerzo de todos, V. A. es, cada día, un hermoso logro de amistad, espiritualidad y apostolado.
De ahí la importancia de ser animador/a o, lo que es lo mismo, de poner los propios talentos (tiempo, paciencia, inteligencia, cariño, empatía, comprensión, oración) al servicio de los demás, desde la humildad de ser y sentirse uno más en el grupo.
Con el fin de obtener una impresión general de todo ello, solicitamos la colaboración de Carmelo Gutiérrez, animador del grupo V.A. en la parroquia del Santo Cristo de la Misericordia, en Boadilla del Monte (Madrid).
E. – ¿Cómo surgió la idea de organizar V.A. en una Parroquia con una población especialmente joven en la que, sobre todo, abundan los matrimonios con hijos pequeños y adolescentes?
C. – En mayo de 2001, dada la creciente población en esta zona, el Obispo de Getafe procedió a la creación de una nueva Parroquia en Boadilla del Monte. En aquellos primeros años éramos muy poquitas las personas mayores. No obstante, en un determinado momento (marzo de 2009), tres jubilados solicitamos al párroco, D. Javier Siegrist, organizar un grupo de mayores en la parroquia. En aquel momento desconocíamos la existencia de V. A. Aceptó la idea sugiriéndonos que contactáramos con Pepita Castilla, presidenta del Movimiento en la diócesis de Getafe. En septiembre de ese mismo año un grupo de catorce personas, hombres y mujeres, iniciamos la andadura como miembros de V.A.
E.- ¿De que forma consiguieron dar a conocer y animar a los mayores para que colaboraran en dicho proyecto?
C. –Comentando con los feligreses mayores habituales de la parroquiaqué significaba V. A.; cuáles eran sus objetivos; informándoles que no eran otros que “llevar y fomentar el mensaje evangélico a los jubilados y mayores, para que los mismos puedan poner al servicio de este mensaje su caudal de fe, experiencia y tiempo”.También ofreciéndoles los trípticos informativos que nos facilitó la Presidenta..
E.- ¿Cuáles son los principales cometidos de un Animador de Grupo?
C.- Conocer a las personas que forman el grupo; preparar las reuniones, presentar propuestas sobre calendarios, informar de las actividadesen la parroquia, convivencias con parroquias en actos comunitarios, cuidar la participación de todos durante los encuentros, en las lecturas, análisis y propuestas que se suscitan.Lo más importante: que todos, en cada ocasión, se sientan satisfechos de pertenecer a V. A.
E.-¿Colaboran también con la Parroquia?
C. – Participamos, con significativa asistencia, en todos los actos que se organizan: conferencias, el anual rastrillo, charla cuaresmal, Semana Santa, Corpus, fiesta parroquial y, algunos, en Cáritas parroquial. La más importante, participar en turnos de oración ante el Santísimo uno o dos veces por semana.
E. – Espiritualidad, Apostolado y Amistad expresan la esencia del Movimiento. En esos tres años de vivencia, cual ha sido el resultado.
C. – Afianzamos nuestra Espiritualidad orando juntos en la capilla al comenzar cada reunión, invocando al Señor, rezando Laudes y el Ángelus a la Virgen. A nivel personal, la mayoría suele asistir diariamente a la Eucaristía. Muchos son asiduos a los Ejercicios Espirituales y también participado en peregrinación a Tierra Santa.
En cuanto al Apostolado. Procuramos transmitir nuestra alegría de pertenecer a V. A. intentando vivir el Evangelio conscientes de, como decía Juan Pablo II, “el mundo de hoy necesita, más que maestros, testigos”. Dentro de nuestras limitaciones procuramos dar ejemplo en la familia y con las personas que nos rodean dentro y fuera de la parroquia.
La Amistad es un bien necesario e inapreciable para el grupo. Por medio de las reuniones y otros encuentros frecuentes sabemos apreciar el valor entrañable de la verdadera amistad.
E. – ¿Cómo grupo organizáis algún evento especial?
C. – Sí. En Navidad y final de curso organizamos una comida fraterna. En primavera planeamos algún viaje religioso/cultural de tres o cuatro días que se vive con gran ilusión. A comienzo y final de cada curso participamos colectivamente en la celebración de dos Eucaristía: al inicio, para recordar a los cónyuges fallecidos de las personas del grupo; al término, en acción de gracias al Señor. Y, todos los años, participamos en la convivencia diocesana de V. A., en la diócesis de Getafe.
E. – ¿Podrías decirnos aspectos de tu vida en los que V. A. haya influido en ella?
C. – Me siento feliz de haber participado en la creación de Vida Ascendente en nuestra parroquia, sin haber antes conocido este Movimiento de Apostolado Seglar. De ser amigo entrañable de tantas buenas y estupendas personas que, posiblemente, no hubiera conocido sin el grupo. De sentir como poco a poco, gracias al deseo de conocer más y más intensamente al Señor que es lo que se aprende en V. A., somos más diestros en el manejo del “candil” en nuestraslargas vidas, siempre con la “torcida” encendida, esperando al Señor.
E. – Pues muchas gracias y enhorabuena.
C. – Gracias a vosotros por esta oportunidad.