24/11/2025. Una representación de la Delegación diocesana de Pastoral Obrera ha participado los días 22 y 23 de noviembre en las XXXI Jornadas Generales de la Pastoral del Trabajo, celebradas en la Casa de Espiritualidad San José, en El Escorial.
El encuentro, convocado por el Departamento de Pastoral del Trabajo de la Conferencia Episcopal Española, ha estado presidido por Mons. Abilio Martínez Varea, obispo de Ciudad Real y responsable de esta área pastoral.
A esta cita han acudido 130 participantes, entre delegados diocesanos de 32 diócesis españolas y miembros de movimientos y realidades eclesiales vinculadas al mundo obrero y del trabajo: HOAC, JOC, ACO, HHT, Cáritas, Hermanitas de la Asunción y Equipos Parroquiales de Pastoral Obrera, entre otros.
Un espacio para la escucha, la reflexión y la comunión
Las jornadas se han celebrado bajo el lema “La evangelización del mundo obrero en un cambio de época”, invitando a los participantes a reflexionar sobre los desafíos actuales en el ámbito laboral, social y cultural.
La ponencia central ha sido impartida por Estrella Moreno, teóloga y directora del Instituto Diocesano de Teología y Pastoral de Bilbao (IDTP), quien ha ofrecido una lectura profunda del actual cambio de época y de las claves evangélicas que orientan la misión de la Iglesia en el mundo obrero.
La reflexión se ha enmarcado en la perspectiva señalada por el Papa —recordado en el texto de Desiderio Desideravi (DT 82)— de que “la realidad se ve mejor desde los márgenes y que los pobres son sujetos de una inteligencia específica, indispensable para la Iglesia y la humanidad”.
Durante el encuentro también se ha presentado el proceso de reflexión promovido por el Departamento de Pastoral del Trabajo, que busca implicar a diócesis, movimientos y comunidades en un discernimiento compartido sobre cómo anunciar el Evangelio en medio de las nuevas realidades laborales, tecnológicas y sociales.
Retos y compromisos para una Iglesia encarnada en el mundo obrero
Según relata Rubén Mateos, delegado diocesano de Pastoral obrera, “las delegaciones han dialogado sobre la necesidad de fortalecer la Pastoral del Trabajo en las parroquias, como espacios de acogida, escucha y acompañamiento de los trabajadores y de quienes sufren precariedad, desempleo o pérdida de derechos laborales”.
En sintonía con el camino sinodal, “se ha subrayado la importancia de estrechar la colaboración entre las diversas realidades eclesiales comprometidas con el mundo obrero, para construir una Iglesia más cercana, encarnada y sensible a las situaciones de sufrimiento que viven tantas familias trabajadoras”, asegura el delegado de Getafe.
Además, en la Eucaristía de las jornadas se ha recordado especialmente a los trabajadores y trabajadoras que se ven afectados por situaciones de injusticia laboral y se ha rezado por la paz en el mundo ante las situaciones de guerra que afectan a tantas poblaciones.
Enviar esperanza al mundo del trabajo
Las jornadas han concluido con un renovado compromiso por seguir anunciando la Buena Noticia de Jesús en el mundo del trabajo, acompañando los procesos de dignificación laboral desde la fe, la justicia y la fraternidad.
Los participantes han hecho suyo el llamamiento del Papa a ser «una Iglesia cercana al mundo del trabajo, compasiva y encarnada, para que el anuncio del Evangelio sea presencia concreta de consuelo y esperanza, pero también palabra profética que recuerde la importancia de garantizar el trabajo para todos».
La Delegación de Pastoral Obrera regresa a la diócesis con este impulso renovado, deseando seguir trabajando —desde el Espíritu— “por una sociedad más justa, solidaria y fraterna, donde cada trabajador y trabajadora sea reconocido en su dignidad”.
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