27/11/2023. El pasado sábado 25 de noviembre, víspera de la festividad de Cristo Rey, la Adoración Nocturna Española de la Diócesis de Getafe convocó una solemne vigilia, a la que se unieron los adoradores de las capillas de la Adoración Perpetua y Permanente.
Junto a los diocesanos asistieron adoradores llegados, entre otras Diócesis, desde Madrid, Alcalá, Toledo y Calatayud, así como un gran número de fieles que quisieron celebrar gozosamente esta vigilia en día tan señalado en la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús.
En el convento de las MM. Carmelitas, el P. José Ignacio Orbe, director espiritual diocesano de la Adoración Nocturna, ofreció, para comenzar, una interesante charla sobre el significado de esta vigilia, la adoración, la reparación al Corazón de Jesús, y la intercesión por España.
Habló sobre el centenario del Monasterio y los casi 150 años de la ANE, fundada por el venerable Luis de Trelles y por el hecho de celebrarla en el Cerro de los Ángeles.
A continuación, tuvo lugar la procesión por la explanada, rezando el santo Rosario.
En la Basílica, el obispo diocesano, D. Ginés García Beltrán, presidió la misa concelebrada con varios sacerdotes.
En la homilía el prelado comentó la primera lectura de Ezequiel, realizando un símil de Cristo con el buen pastor "que se preocupa de sus ovejas y va en busca de la perdida".
Después señaló cómo “la frecuencia en las misas y las adoraciones, convierten nuestros corazones a Cristo y, la ausencia de esas prácticas, nos matan espiritualmente”.
“La fiesta de Cristo Rey es el ‘amén’ del año litúrgico” señaló D. Ginés y añadiendo, en relación al Evangelio, que “Dios nos juzgará con amor y por el amor”.
Al término de la homilía se impusieron las insignias de ‘activos’ a 25 nuevos adoradores.
Después se expuso el Santísimo, se rezó el ‘oficio de lectura’, un Te Deum y a continuación se dispuso un turno de una hora de adoración personal en silencio.
Tras unas oraciones finales los adoradores salieron en procesión con el Santísimo, y ascendieron a la base del monumento del Sagrado Corazón.
Destaca José María Pérez Mosso, expresidente de la Adoración Nocturna de la Diócesis, que “este ha sido uno de los momentos más emotivos, todos arrodillados y en silencio: la bendición de España y la consagración al Corazón de Jesús que hizo San Juan Pablo II en 1986”.
“Toda la vigilia ha sido una bendición, por la devoción, la alegría verdadera, la participación de 600 a 800 adoradores, 20 banderas de la adoración, en una noche preciosa y no muy fría” añade.
Al término de la consagración todos regresaron a la Basílica para proceder a la reserva del Santísimo y entonar el canto final a la Virgen.
Aquí se puede ver la misa: https://www.youtube.com/watch?v=sc3HV52mF7k
