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05/02/2024. La Parroquia San Pedro Bautista de Alcorcón ha vivido un intenso año jubilar unida al resto de las comunidades franciscanas de la Diócesis, y en el que han podido compartir con los fieles distintos momentos especiales de celebración.

El Año Jubilar fue concedido por la Santa Sede con motivo de los 800 años de la primera escenificación del belén en Greccio (Italia) por San Francisco de Asís.

“Ha sido un tiempo fuerte, durante el cual hemos podido reflexionar detenidamente sobre la humildad y humanidad de Dios, según nos exhortaba San Francisco de Asís, y en el que hemos tenido celebraciones con diferentes realidades eclesiales diocesanas, pudiendo ganar la Indulgencia Plenaria que había dispuesto la Santa Sede para este 8° centenario” destaca el párroco, Fr. Juan Pedro Ortega.

A lo largo de este tiempo jubilar han celebrado encuentros con las religiosas de clausura vinculadas a la familia franciscana, como las Hnas. clarisas de Cubas de la Sagra, Valdemoro y Chinchón, o las clarisas capuchinas de Pinto y las MM. concepcionistas de Aranjuez. 

Ya en las últimas semanas, se organizaron también los jubileos de los distintos grupos parroquiales y una Hora Santa de la pastoral juvenil del arciprestazgo de Alcorcón. 

El día de la clausura de este tiempo de jubilar, el pasado 2 de febrero, celebraron solemnemente la fiesta de la presentación del Señor con una misa de acción de gracias, durante la cual fueron presentados los niños bautizados en el último año, y se recordó de modo particular a los integrantes de la vida consagrada y a las viudas católicas, que festejan también ese día su jornada anual. 

Para cerrar los actos de clausura, ya de noche, rezaron unidos en la Hora Santa, que en esa parroquia se denomina ‘Ven y Descánsate’ y que celebran cada primer viernes de mes.

Por último, como broche final de estos meses especiales, los fieles, unidos a la comunidad franciscana, celebraron el pasado domingo 4 de febrero la fiesta patronal del titular de la parroquia, San Pedro Bautista, con una eucaristía presidida por el secretario provincial de los Franciscanos, Fray Antonio Arévalo.