eucaristiadoswebEl martes 28 de abril se realizaron en la Diócesis diversos actos en favor del empleo, enmarcados dentro del Año de la Caridad y organizados por Cáritas, Pastoral Obrera, Migraciones y la Asociación Murialdo de Getafe.
Se convocó un encuentro de información y solidaridad dentro de la Jornada Diocesana de Empleo que se había recordado en las parroquias el domingo anterior. Este acto, celebrado en el Auditorio Federico García Lorca de Getafe, contó con la presencia del director de Cáritas diocesana, D. Enrique Carrero, que presentó el ‘Informe anual del Programa Diocesano de Empleo 2015’, en el que se analizan los datos de la realidad del desempleo en la Diócesis y las acciones de los diversos proyectos de Cáritas.
Durante el encuentro se destacó que, en la Diócesis de Getafe, son los más jóvenes, las mujeres, los inmigrantes y los mayores de 45 años los que tienen las mayores dificultades para acceder al mercado laboral.
También se presentaron algunos datos que demuestran la situación de cronificación del desempleo en algunos tramos de población, el endeudamiento progresivo de los hogares y el aumento de la precariedad laboral.
La segunda parte del acto estuvo a cargo de D. Raúl Flores, técnico de Estudios de Cáritas Española y de la Fundación Foessa, que ilustró a los participantes con la conferencia ‘Sobrevivir a la precariedad laboral’, que respondía al contenido fundamental de la campaña de este año.
La tarde continuó con un gesto público de solidaridad que se realizó en la plaza ubicada frente a la estación de Renfe de Getafe Central, que tomó como referencia el Año de la Caridad en el que está inmersa la Diócesis. En el transcurso del acto se leyó un manifiesto y se disfrutó de la representación crítico-humorística de ‘Subasta de empleo’, a cargo de un grupo de teatro de Aranjuez.
Los actos culminaron con la celebración de la Eucaristía en la Parroquia de San Rafael, organizada por la Delegación Diocesana de Pastoral Obrera y presidida por el Vicario General, D. José María Avendaño, con motivo de la festividad del 1º de mayo, San José Obrero y Día Internacional de la Salud Laboral.
En el transcurso de la misa hubo un momento especial dedicado al recuerdo de nuestros hermanos más necesitados y desfavorecidos por la crisis, que se encuentran en paro, encomendando sus vidas y su cuidado al Creador, pero sin perder de vista la acción social y caritativa que todos los católicos estamos llamados a hacer, con generosidad de espíritu.