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La parroquia franciscana San  Pedro Bautista (Alcorcón) acogió por undécimo año consecutivo la ‘Luz de Belén’, celebración que reunió a decenas de feligreses –familias enteras- en un ambiente navideño de alegría y fraternidad, el pasado fin de semana del 19 y 20 de diciembre.

Debido a la pandemia, y para garantizar la reducción de aforo y que nadie se quedara sin su ‘Luz’, se organizaron dos celebraciones: una en la tarde del sábado  y otra en la tarde del domingo; presididas por el párroco Juan Pedro Ortega acompañado de su vicario parroquial, el padre Amancio Pérez.

Como en años anteriores, los protagonistas fueron los niños llenos de ilusión, con sus farolillos, acompañados de sus padres, y los jóvenes de la parroquia.

También han estado presentes los grupos de scouts de Alcorcón ‘Libertas’ y Nómadas’

Este año, a causa de la pandemia, los scouts de Austria, encargados de traer la luz de la gruta de Belén, no han podido volar a Tierra Santa (Jerusalén), por lo que las Clarisas de Cubas de la Sagra se han encargado desde el año pasado de custodiar la llama y mantenerla encendida.

Así los fieles de Alcorcón han podido compartirla en estas fechas “ya que la luz es símbolo del niño que nace en Belén y que es la Luz del mundo”, como señaló el párroco Juan Pedro Ortega durante la celebración.

No quisieron los padres franciscanos dejar de mencionar la situación que se avecina en las próximas celebraciones navideñas señalando que “vamos a vivir, sin duda, una Navidad diferente. Echaremos en falta en nuestras reuniones familiares a  personas: a unas, porque las medidas de sanidad así lo han dispuesto; y, a otras desgraciadamente, porque el coronavirus se las ha llevado de entre nosotros para siempre” explicó el padre franciscano Amancio.

Pero, en su mensaje de cada jornada quisieron transmitir la esperanza que trae cada Navidad el nacimiento del Mesías: “que a pesar de todo, se haga realidad lo que reza este verso de las primeras vísperas de Navidad: ‘Hoy grande gozo en el cielo todos hacen, porque en un barrio del suelo nace Dios. ¡Qué gran gozo y alegría tengo yo!’”.