El vicario general de la Diócesis de Getafe, José María Avendaño, fue el encargado de pronunciar el pregón de Semana Santa en Alcorcón el pasado sábado 26 de marzo en la Parroquia San Pedro Bautista, en un acto en el que también destacó la magistral interpretación de la Banda Municipal Herrera del Duque (Badajoz), invitada por los franciscanos.
Avendaño estuvo acompañado por el arcipreste, José Juan Lozano; el párroco Juan Pedro Ortega y otros hermanos franciscanos; sacerdotes de Alcorcón, miembros de Hermandades y Cofradías y un gran número de fieles.
Además se sumaron algunos concejales del Partido Popular, Vox y Ciudadanos y el antiguo Comisario de la localidad que no quisieron perderse el evento.
El vicario general en su pregón invitó a los fieles presentes a caminar unidos a la Iglesia, dejando el egoísmo y el individualismo aparte y a fijar su mirada en Cristo “donde se encuentra la Vida”.
“El hombre puede construir un mundo sin Dios pero este mundo acabará por volverse contra el hombre” dijo el vicario parafraseando a San Juan Pablo II y lanzando un mensaje especial a los jóvenes cargado de esperanza por el futuro.
“No tengáis miedo de mirar a Cristo, este Cristo de Medinaceli, con las manos apresadas por ti y por mí que luego muere en un madero para que tú y yo nos salvemos” insistió mirando a las impresionantes imágenes que presidían el altar ese día.
“No nos cansemos de hacer el bien, la Cuaresma es un tiempo favorable para la renovación personal y comunitaria que nos conduce a la Pascua de Jesucristo muerto y resucitado”.
El vicario tuvo un recuerdo especial para todas las víctimas de la guerra –especialmente a las madres que han perdido a sus hijos- y de las familias de Ucrania para quienes pidió la acogida explicando cómo la Diócesis está preparando ya un lugar para ellos.
“La paz se construye con el corazón y con la oración” dijo Avendaño refiriéndose a la Consagración de Ucrania y Rusia al Corazón de María realizada por el papa Francisco el día anterior.
Para concluir, el vicario general de la Diócesis también recurrió al ejemplo de Santa Teresa de Calcuta –que estuvo en Leganés en los años 80- animando a seguir su ejemplo de caridad y ver en el otro, en el prójimo, a Cristo “que nos dice ‘tengo sed’ y nos necesita”.
