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Más de 50.000 personas, llegadas desde todos los puntos de la Diócesis de Getafe, acompañaron a la Virgen de los Ángeles en su peregrinación de bajada desde la Ermita en el Cerro hasta la Catedral de Getafe.

Algunos de los ciudadanos de Getafe no pudieron reprimir sus lágrimas y manifestaron que “llevaban dos años esperando a que la Virgen volviera a visitarles en las calles de la localidad”.

Acompañada por los miembros de la Hermandad de la Virgen de los Ángeles, la patrona llegó a la rotonda de la Base Aérea donde fue recibida por el obispo de Getafe, D. Ginés García Beltrán; la alcaldesa, Sara Hernández; el vicario episcopal para el Cerro de los Ángeles, Manuel Vargas;  el arcipreste de Getafe, José Ángel García Botello; las autoridades civiles y militares y hermanos de asociaciones y congregaciones de la Diócesis.

Una de las novedades este año es que también recibía a la Virgen la imagen de Santa María Magdalena. Después de que la alcaldesa entregara el bastón de mando de la ciudad a la patrona, ambas imágenes emprendieron juntas el camino hasta la Catedral, acompañadas también por los niños vestidos de Primera Comunión.

A la llegada a la Seo getafense el obispo dirigió unas palabras a todos los presentes destacando la ilusión personal y de todo el pueblo ante la llegada de la patrona y por haber podido realizar este año la bajada, después de dos años de pandemia que habían imposibilitado esta peregrinación, e invitándoles a poner sus esperanzas y dificultades a los pies de la Virgen.

“Os invito a contar a María, que siempre nos escucha como una Madre, todos vuestros problemas, vuestras peticiones. A buscar en Ella el consuelo” insistió el obispo.

La Virgen de los Ángeles permanecerá en la Catedral de Getafe hasta el día 12 de junio, donde presidirá las distintas celebraciones en su honor y donde espera la visita y la oración de todos sus fieles.