pazbelenalcorcondentroLas parroquias de la Diócesis se están preparando para celebrar la llegada de la Luz de la Paz de Belén y acogerla en sus hogares.

Alcorcón

Los franciscanos de la Parroquia San Pedro Bautista (Alcorcón) celebrarán un encuentro para compartir ‘La luz de la paz de Belén’ -que los fieles de la localidad podrán llevarse a sus casas- el viernes 15 de diciembre, a las 19.00 horas.

Para llevar la luz a sus hogares, los niños y mayores deberán portar un farol de parafina.

El párroco Juan Pedro Ortega quiere que “esta luz inunde los hogares de las familias de Alcorcón” y por ello convoca a niños y mayores a participar.

Para llevar la luz a sus hogares, los niños y mayores deberán portar un farol de parafina.

Valdemoro

El convento de la Encarnación, de las clarisas, en Valdemoro, recibirá la Luz de Belén, el viernes 16 de diciembre, a las 18.00 horas. A esta celebración están invitados también todos los fieles diocesanos, que quieran llevar esa luz hasta sus hogares para iluminarlos. Las hermanas repartirán unas velas para los fieles y unos farolillos para las parroquias que quieran participar en la iniciativa.

Humanes

La Parroquia Santo Domingo de Guzmán, en Humanes, también invita a los fieles a recibir en sus hogares la luz de la paz de Belén, en la Eucaristía que se celebrará el viernes 22 de diciembre, a las 19.30 horas.

Las familias que deseen recibirla deben portar un farolillo para llevarse la luz a casa.

 

Origen de 'La luz de Belén'

Esta iniciativa nació en la televisión pública austriaca a finales de los 80 y principios de los 90 del siglo pasado, dentro de un programa social denominado 'Luz en la oscuridad', dedicado a los niños con necesidades tanto en Austria como en el extranjero.

En 1990 se firmó un acuerdo entre scouts y guías de muchos países para permitir que la luz viajara por Europa y América.

Cada año, un niño o una niña del norte de Austria recoge la luz de la cueva donde nació Jesús en Belén y la lleva a Europa, en una ceremonia ecuménica que tiene lugar en Viena semanas antes de la Navidad.

Después, los scouts la distribuyen por parroquias, hogares particulares, hospitales, residencias de ancianos, prisiones y otras asociaciones de sus respectivos pueblos y ciudades.