Centenares de estudiantes del Colegio Divina Pastora (Getafe) se sumaron el pasado 8 de marzo a la celebración de la fiesta en honor de su fundador, san Faustino Míguez, en una animada eucaristía presidida por el párroco de San Rafael, José Manuel García Naranjo.
En su homilía, García Naranjo recordó la celebración del Día Internacional de las Mujeres y que san Faustino fue un gran promotor del género femenino y “fundador de una familia de ‘grandes mujeres’ las Hijas de la Divina Pastora”, destacando que el padre Míguez “fue muy sensible ante la situación de marginación educativa que vivían especialmente las niñas. Y hablaba ya en su tiempo de la importancia de la mujer para la sociedad”.
El sacerdote quiso reforzar su argumento aportando datos: “según Naciones Unidas, el 70% de las personas pobres en el mundo son mujeres. La pobreza tiene nombre de mujer”.
En referencia al tiempo cuaresmal animó a todos los estudiantes a frecuentar la Iglesia “por lo menos en domingo” y a hacer presente en el amor de Dios en medio del mundo del sufrimiento.
“Ese amor que ha sido derramado en nuestros corazones, y en todos los corazones porque lo ha querido Dios. En toda persona hay algo de Dios. Como nos dice el Evangelio que hemos leído, Dios está en el hambriento pasando hambre, Dios está en el sediento pasando sed, Dios está en el forastero (extranjero) pidiendo acogida, Dios está en el enfermo sufriendo la enfermedad, Dios está en el preso muy solo, queriendo ser visitado,... cuando atendemos a uno de ellos, estamos también atendiendo a Dios” declaró el sacerdote.
Para terminar la homilía, García Naranjo recordó unas palabras de “un gran hombre de Dios como lo fue San Faustino”:
“Al final del camino me dirán:
—¿Has vivido? ¿Has amado?
Y yo, sin decir nada,
abriré el corazón lleno de nombres”
Faustino Míguez
San Faustino Míguez fue un sacerdote escolapio gallego a quien el papa Francisco canonizó en el año 2017.
Su cuerpo incorrupto descansa en la capilla del Colegio Divina Pastora (Pº Pablo Iglesias, 5. Getafe), un centro educativo dedicado a la formación en la fe de sus alumnos desde el año 1907, entonces sólo para niñas.
En la actualidad este colegio, ahora mixto, ha crecido conforme a las demandas de la sociedad, sin descuidar el ideario inicial de su fundación. Por eso ha implantado la dinámica de los Oratorios de Niños para la formación religiosa de los más pequeños y el voluntariado para los jóvenes.
También cuenta con un museo que, a través de fotografías, recoge la historia de la congregación y de su fundador, san Faustino.
