El obispo, D. Ginés García Beltrán, ha bendecido las obras de construcción de la que será la nueva Casa Sacerdotal de la Diócesis de Getafe en la mañana del miércoles 16 de marzo.
Este edificio, que quedó abandonado hace más de 15 años a mitad de su construcción como Casa regional de Murcia, está situado en la calle Martín Gato esquina con calle Averroes, frente a la Parroquia Santa Maravillas de Jesús, en Getafe Norte, muy próximo al nuevo barrio de Los Molinos. Albergará una residencia para sacerdotes mayores y despachos de la nueva sede del Obispado.
“Hoy podemos oficialmente inaugurar las obras y lo hacemos con una acción de gracias a todos los que las están haciendo posible con nombres y apellidos” dijo el prelado diocesano.
El obispo agradeció la preparación y el desvelo del vicario general y moderador de Curia, Javier Mairata, y el trabajo del Consejo diocesano de Asuntos Económicos “que nos apoyó e impulsó a seguir adelante”.
También ha tenido palabras de gratitud para el arquitecto Juan de Dios de la Hoz y su equipo “por el esmero en planear al milímetro la construcción de esta Casa” y a la constructora “que ha hecho lo indecible para sacar adelante la obra en medio de todas las dificultades”.
Gracias al acuerdo entre Obispado y Ayuntamiento de Getafe, el edificio a medio construir que quedó abandonado será reconstruido y habilitado para darle uso.
“Es una casa necesaria para la Diócesis donde los sacerdotes estarán atendidos dignamente, tendrán un lugar digno donde pasar los últimos años de su vida" subrayó el obispo.
Esta nueva edificación sustituirá a la primera sede del obispado, el Colegio La Magdalena, que fue cedido por el Ayuntamiento de Getafe a la Diócesis en los años 90. Ese inmueble pasará a ser un centro de mayores en los próximos meses.
El plazo previsto de ejecución de las obras de la Residencia y nueva sede es de catorce meses. Los trabajos han comenzado dos años después de que la Diócesis de Getafe y el Ayuntamiento de esta localidad firmaran un protocolo de intenciones por el cual se acordaba la devolución a la propiedad municipal del edificio de la calle almendro que ha albergado la sede del obispado desde sus inicios. La pandemia de la Covid ha provocado el retraso en la puesta marcha de las obras de reconstrucción.
