El obispo diocesano, D. Ginés García Beltrán, presidió el pasado 29 de mayo -solemnidad de la Ascensión del Señor al Cielo- las primeras profesiones simples de tres novicias del Instituto Mater Dei, fundado en San Luis (Argentina) y presentes en el convento Nuestra Señora de los Mártires, en Ciempozuelos. Las hermanas Inés de Jesús, Fátima Judith y Trinidad prometieron vivir en pobreza, castidad y obediencia por un año, con vistas a renovar sus votos hasta poder realizar la profesión solemne.
El prelado estuvo acompañado por los vicarios episcopales para la vida consagrada, Ramón García-Saavedra, y para el Cerro de los Ángeles, Manuel Vargas, así como del párroco y arcipreste del lugar, Israel Guijarro, y una decena de sacerdotes. La Hna. Karina, superiora de la comunidad, recibió -como delegada de la Madre María Jesús Becerra, superiora general del Instituto- los votos de las hermanas profesas, asistida por la Hna. Tita María, Maestra de Novicias.
En sus palabras -que pueden escucharse en este enlace https://youtu.be/dF-eN1RmRu8- García Beltrán alentó a las jóvenes religiosas a entregarse a Cristo: “no es la pobreza lo que se abraza, sino a Jesús en su pobreza; no es la castidad o la obediencia, sino a Jesús casto y obediente.” El prelado se congratuló de esta ceremonia, “signo de que Dios sigue llamando a su seguimiento” y deseó que éstas sean las primeras profesiones religiosas de muchas más.
La solemne celebración estuvo acompañada por el coro y órgano dirigidos por las hermanas Mater Dei.
Tras este acto, D. Ginés se desplazó hasta la Ermita de la Virgen del Consuelo, patrona de Ciempozuelos, donde presidió la Eucaristía con la que se ponía punto final al mes de María que se ha celebrado en dicha iglesia durante el mes de mayo. En la celebración el obispo confirió la confirmación a once adultos y dio la primera comunión a una joven que era recibida en la Iglesia católica tras ser bautizada en su infancia en una comunidad evangélica.
El pastor diocesano agradeció a la Hermandad del Consuelo la invitación recibida, y la organización de la celebración, que estuvo acompañada al órgano por el párroco Israel Guijarro. Beltrán animó a los asistentes a mirar mucho a María, que nos hace mirar al cielo, y que nos lleva hacia Cristo. Invitó a los confirmados a permanecer en la Iglesia, que es donde se encuentra María, la gracia, Cristo, la salvación.
La ceremonia concluyó con la entrega por parte de la Hermandad de un cuadro de la Virgen del Consuelo como regalo a D. Ginés por su visita y su cuidado paterno.
