El vicario episcopal para la Evangelización y la transmisión de la Fe, Jesús Manuel Úbeda, presidió el pasado domingo 26 de junio, el Rito de Ingreso o Admisión al Catecumenado, en una bella ceremonia cargada de simbolismo celebrada en la Catedral Santa María Magdalena (Getafe).
Seis fueron los ‘simpatizantes’ que participaron en la ceremonia, que empezó en el atrio de la Iglesia donde tuvieron lugar los ritos iniciales: la petición de la fe de la Iglesia que otorga la vida eterna, su renuncia al demonio y a los ídolos y la signación con la cruz de Cristo. Acto seguido fueron invitados a entrar en la Iglesia siguiendo esta misma cruz.
Acompañados por sus padrinos y catequistas, familiares y amigos, escucharon con atención la Palabra de Dios, viva y eficaz, que se les entregó “para que sea su mejor compañera de camino”, tal y como les indicó D. Jesús.
Los catecúmenos, procedentes de España, Ecuador y Francia, pertenecen a cinco parroquias distintas de Boadilla del Monte, Humanes de Madrid, Parla y Getafe y tienen edades comprendidas entre los 17 y 53 años.
Después de unos meses de preparación en el Catecumenado y verse atraídos por la persona de Jesús, el vicario episcopal les invitó a escuchar la voz de Jesús como Pedro y Andrés: "Venid y lo veréis", y a seguirle a través del camino que la Iglesia les indica, fiándose de ella.
“La madre que ya les tiene reservado un sitio y cuida con verdadero amor a estos catecúmenos para que un día lleguen a ser verdaderos hijos de Dios e hijos suyos, a través del Bautismo” explicó Jesús.
“Ellos cuentan con nuestras oraciones y sacrificios, porque como nosotros, conocen bien la ruindad del hombre que no sigue a Cristo, verdadero camino, verdad y vida” subrayó.
