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La Diócesis de Getafe ha vivido un intenso fin de semana misionero, desde el 14 al 16 de octubre, con el objetivo de preparar la Jornada del Domund del próximo domingo 23 y la celebración eucarística que presidirá el obispo D. Ginés García Beltrán, desde la Catedral, transmitida por la segunda cadena de TVE para toda España.

El viernes 14, un centenar de jóvenes se reunieron junto al obispo, convocados por las Delegaciones diocesanas de Misiones y de Juventud, para rezar por los frutos de la labor evangelizadora que realizan los sacerdotes, laicos y familias en misión.

albertoencatedraldentroContaron con la presencia del sacerdote Alberto Iñigo, actual párroco en La Inmaculada (Alcorcón) que compartió su testimonio como misionero durante siete años en  Brasil.

“Estamos llamados a ser testigos aquí y allí” destacó Iñigo junto al obispo diocesano que también quiso impulsar con sus palabras el anuncio del evangelio y la celebración de la Jornada Mundial de las Misiones.

El Tren Misionero

Esta llamada a la evangelización se repitió al día siguiente, sábado 15 de octubre y fiesta de Santa Teresa, para los más de 600 niños y adolescentes participantes en el Tren Misionero.

Acompañados por catequistas, padres y sacerdotes, llegaron hasta el Cerro de los Ángeles (Getafe) desde diferentes ciudades de España a bordo del ‘Tren misionero’ para ser ‘Testigos… de corazón’ y rezar por los misioneros diocesanos acompañados de las canciones del grupo ‘Espíritu Misionero’ y de las actividades preparadas para ellos a lo largo del día.

El Tren Misionero es una jornada nacional festiva y celebrativa organizada por Cristianos sin Fronteras en colaboración con la Delegación de Misiones de Getafe para invitar a los niños y a sus familias a anunciar y reflexionar sobre su implicación en la tarea de la evangelización que este año se celebraba bajo el lema ‘Testigos… de Corazón’.

A lo largo del día los participantes pudieron escuchar una catequesis en la que se les impulsaba a vivir más intensamente su carisma misionero en cada ambiente y el testimonio de la joven, Sofia Zvir, ucraniana que lleva en España diez años y que compartió la labor que la Iglesia está llevando a cabo para ayudar a los habitantes de este país en guerra.

Después, todos juntos celebraron una eucaristía presidida por el obispo diocesano, D. Ginés García Beltrán, que no quiso perderse el animado encuentro infantil y juvenil.

El obispo estuvo acompañado por varios sacerdotes, entre los que se encontraban el director nacional de Obras Misionales Pontificias, José María Calderón y el delegado diocesano de Misiones, Juan José Alonso.

D. Ginés en su homilía dio la bienvenida a los niños y a todos los participantes explicándoles que “el Cerro es el centro geográfico de España” y la importancia de la figura que aparece sobre la Basílica “hay una imagen grandísima del Corazón de Jesús con los brazos abiertos que significa que Jesús tiene los brazos abiertos para acogernos a todos y hoy os acoge a cada uno de vosotros en este lugar y también en su corazón”.

García Beltrán, con la mirada puesta en el Domund, que la Iglesia universal celebrará el domingo 23 de octubre, animó a todos los presentes, pero sobre todo a los niños, a evangelizar y a dar testimonio de corazón “a salir de la comodidad del sofá, de la 'tablet' y de la 'play' para darnos cuenta de que existen otras personas, otras culturas y otros pueblos”.

“Lo primero que hace el misionero es salir de su mundo. Hay hermanos y hermanas nuestras que han ido a lo más lejos del mundo para anunciar a Jesucristo. Ese es el motor de un misionero. Los misioneros son testigos de Jesucristo” insistió el obispo “y comparten la alegría de descubrir al Señor”.

“Este tren misionero nos recuerda que los niños son misioneros” les dijo a los pequeños.

En la fiesta de Santa Teresa de Jesús, que se celebraba ese mismo sábado 15 de octubre, el prelado quiso recordar a una de sus hijas carmelitas, Santa Teresita de Lisieux, una monja que viviendo en clausura, “quiso ser misionera y por eso es la patrona de las misiones” les explicó a los niños.

“Esto queridos niños y queridas familias –añadió D. Ginés-  significa que todos estamos llamados a ser misioneros”. 

Una vez terminada la misa, todos los participantes bajaron hasta el pinar del Cerro, donde comieron y se prepararon para la ceremonia de envío que tuvo lugar poco después en la explanada y para la suelta de globos con forma de corazón que inundaron el aire de espíritu misionero.

Llamados a correr por el Domund

Para concluir el intenso fin de semana, el domingo 16 de octubre Obras Misionales Pontificias puso en marcha la carrera solidaria ‘Corre por el Domund’ (www.correporeldomund.es). Una carrera no competitiva, para todos los públicos, en la que se puede participar tanto virtual como presencialmente y que concluirá el 23 de octubre y en la que invitaba a todos a participar para dar visibilidad a la campaña misionera y a la Jornada Mundial de las Misiones.

 

 

 

Una vez terminada l.