Los responsables de la Escuela del Movimiento de Cursillos de Cristiandad de la Diócesis de Getafe se reunieron el fin de semana del 8 al 9 de octubre en el Centro Espiritualidad de las Carmelitas misioneras de Ávila para iniciar el nuevo curso.
Este es el segundo año que mantienen este encuentro durante todo un fin de semana con el objetivo de profundizar en amistad y poder prepararse bien para los retos de evangelización que se avecinan.
Bajo el lema ‘Poniendo a Dios en el centro. Movidos por el Espíritu’, las jornadas se han distribuido entre momentos de formación, oración testimonio y celebración.
Uno de los participantes, Eduardo Aguilar, de la ultreya de Arroyomolinos-Moraleja destacó de este encuentro que fue “una convivencia emocionante” donde experimentó, como en ocasiones anteriores, “el buen ambiente y la familiaridad”.
“Da igual que hayamos estado días, meses o, incluso años sin poder compartir una convivencia con los hermanos, parece que fue ayer cuando estuvimos juntos compartiendo misa y mesa. Y eso es algo que me llama la atención que, a pesar de la distancia, nunca tenemos la sensación de ese distanciamiento” destacó Aguilar.
“Esto sólo se puede conseguir porque compartimos nuestra vida a través de la VIDA. Porque cómo dice nuestro Señor Jesucristo: “donde está tu tesoro, allí estará tu corazón”, y mientras permanezcamos unidos a través de nuestro corazón, no habrá distancia que nos separe” subraya.
“Caminar en comunidad es lo que nos ayuda a no salirnos del Camino, pero en nuestro caso es una escalera mecánica que, sin tú hacer nada, te está elevando por el camino de santidad al encuentro con nuestro Señor” destaca este miembro de la ultreya de Arroyomolinos-Moraleja.
