El obispo D. Ginés García Beltrán presidió el pasado sábado 22 de octubre la toma de posesión del sacerdote José Julio Fernández Perea como nuevo párroco de la Parroquia San Juan Pablo II (Alcorcón).
En una multitudinaria eucaristía celebrada en el Colegio Juan Pablo II (Alcorcón) esta nueva parroquia comenzó su andadura pastoral.
El prelado estuvo acompañado por el arcipreste de Alcorcón, José Juan Lozano; por el nuevo vicario parroquial, Ángel Villaplana y casi una veintena de sacerdotes de la localidad y de otras aledañas.
Además, asistió el letrado del Consejo del Estado, Alfredo Dagnino; el presidente de la Fundación Educatio Servanda, que gestiona los centros educativos Juan Pablo II, Juan Carlos Corvera; el candidato del Partido Popular al municipio de Alcorcón y exalcalde de Boadilla del Monte, Antonio Gonzalez Terol; los directores de los colegios Juan Pablo II de Alcorcón y de Parla; miembros de la comunidad educativa y un gran número de familias vinculadas al centro.
La celebración estuvo marcada por los simbólicos ritos propios del día, como la entrega de la Palabra, del confesionario o del Sagrario, la lectura del nombramiento de párroco y la renovación de las promesas sacerdotales.
El prelado en su homilía, además de agradecer la presencia de sus hermanos en el sacerdocio y de las autoridades, comenzó agradeciendo la colaboración de la fundación Educatio Servanda, que ha cedido sus instalaciones para el inicio de esta nueva parroquia.
También, visiblemente emocionado, García Beltrán quiso recordar algunos de los momentos de su vida en los que coincidió con el santo papa polaco destacando “quién me iba a decir a mí que un día iba a dedicar una parroquia en la Diócesis de Getafe a san Juan Pablo II” y pidió al nuevo párroco y a los fieles “que esta parroquia, con cimiento en Jesucristo, difunda la teología y el ser de san Juan Pablo II”.
“Este papa polaco ha sido testigo de lo que significa un mundo, una sociedad sin Dios y él trabajo para llevar esa presencia de Cristo a la gente” subrayó el obispo, añadiendo “hoy en día, en nuestros barrios todavía hay muchas personas que no han oído hablar de Dios”.
“Estamos llamados, siguiendo el ejemplo de San Juan Pablo II, a hablar a todos del amor de Dios, de la misericordia de un Dios que ha venido a salvarnos, de un Dios que nunca se rinde ante el mal, que nos salva del mal con el bien” aseguró.
“Queridos sacerdotes que vais a llevar la vida pastoral de esta nueva parroquia, haced de Dios su fundamento y que sea una comunidad misterio de comunión y misión” pidió el prelado explicando también que “la parroquia es la Iglesia que está en la casa de sus hijos y de sus hijas y hay que salir de las puertas del templo, llevando a Cristo a la familia, a la casa, a las relaciones sociales”.
“La Parroquia tiene que salir a la calle, al barrio, donde hay tantos hombres y mujeres que no conocen al Señor” insistió.
D. Ginés quiso terminar su homilía poniendo la nueva parroquia bajo la protección del santo polaco, y de la Virgen María porque “no se puede entender a san Juan Pablo II y su espiritualidad sin la oración ‘Totus tuus Mariae’ que el santo tomó como lema episcopal” .
